Complacencia

Estoy tejiendo palabras
a través de tus recuerdos,
de aquellos lejanos años
que llevamos muy adentro.

Muchos buscan tu amistad
entre miles de canales,
ríen y sueñan juntos
leyendo tus simpáticos anales.

Con cincuenta y uno más
te has propuesto
un canto hacer,
de tu vida , de tu infancia ,
¡haces que todo vuelva a renacer!

Si alguna vez has aportado
un granito inadvertido,
ha sido en mi persona
dónde lo has introducido.

Sin pensarlo ni pedirlo
y sin haberlo decidido,
de la noche a la mañana
en bloguera, me he convertido.

Para bien o para mal
la tecnología he de usar,
siento que ya me empuja
en mi lento navegar.

¿Pero porqué ésto he de atender?
Me pregunto al instante.

Alguien se me presentó delante,
dándome a escoger :
o te aplicas a ésto ahora
o tienes la de perder.

Atrapada me quedé
por la nueva tecnología,
tenía una buena salida
para la luz llegar a ver.

No sé bien
si lo terminaré de exponer,
cautiva por un nuevo proyecto
así es cómo lo denominé.

Si saldando una deuda
aligerase mi corazón,
¡préstame tus manos!,
y así me sentiré mejor.

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