lunes, 27 de septiembre de 2010

Abrazo

                                                          Foto Tanci






Vive la planta
abrazada al muro
encaramada.









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12 comentarios:

Isabel Martínez Barquero dijo...

Es un abrazo que dota de vida pujante a la fría piedra, un abrazo hermoso, en color verde esperanza.
Estupenda la poeta y muy bueno el haiku.
Besicos, querida Tanci.

Alicia dijo...

Desde el otro lado de tu municipio no puedo faltar a mi cita con tus haikus. Abrazos insólitos, buscando algo intrigante en donde no nos parece encontrar nada de interés. Los elementos se siguen fundiendo en un abrazo vital, una especie de simbiosis en la que la planta aporta al muro cualidades que éste nunca habría imaginado. Así son las amistades: aportan riquezas inimaginables. Te mandé un mail y aquí te mando un abrazo fuerte con nombre guanche: Ifara.

Conchi dijo...

Querida Tanci, ¿cuántos haikus llevas ya escritos? ¡No paras! Y cada día me gustan más.
De nuevo salieron los abrazos, esos que son tan necesarios para que la vida continúe. Abrazos gratis, sin esperar nada a cambio. A lo mejor si nosotros también nos los diéramos creceríamos alto, como la planta.

Yo te mando uno muy grande.
(Tu palabra ya está en la plaza. Gracias por aceptar el turno)
Conchi

tanci dijo...

Mi querida Isabel, ese abrazo verde da calor aunque el color sea frío. Imagino con cuánto agradecimiento lo recoge la fría piedra. Ahí están ambas dándose. Me alegra verte. Siempre puntual a este pequeño rincón. Me enternece tu estímulo y lo recojo con el corazón. Gracias. Un abrazo.

tanci dijo...

El mundo de la amistad es inimaginable, cierto es. Puede vestirse de diversos colores y tener distintas frecuencias. En este caso la planta no se aprovecha del muro y el muro tampoco hace uso de ella. Más bien congenian juntas. Tú lo has dicho;en una simbiosis íntima favoreciéndose mutuamente. Parece que ninguna ha pedido nada, y sin embargo se favorece. En la frescura de la sombra, en las raíces echadas,en el calor aportado... Vital el abrazo. Ifara estará contenta de acoger lo soñado durante mucho tiempo.Y esa es una celebración maravillosa. Un abrazo lleno de cariño.

tanci dijo...

Mi querida Conchi, cuánta razón tienen en lo de los abrazos. Tienen la facultad de ennoblecer, de apoyar, de dar seguridad, de acoger, de ser saludables. Y pienso, al igual que tú, que no debemos escatimarlos. Son intrínsecos al ser humano y pasan a formar parte de su parte emotiva. Y abrazo, como nuestra planta, se apunta muy alto. Ahí es dónde podríamos llegar. A una altura construida de común acuerdo. Como lo ha hecho ya apoyándose en la piedra y ésta acogiéndola. Me alegra que te haya gustado. Y si es verdad, ya son unos cuántos haikus los que llevo. Parece que se han pegado a mi como mi piel últimamente. Gracias por tu visita. Siempre me da mucha alegría. Un abrazo de lo más caluroso

FLACA dijo...

Tanci:
Los haikus (no sólo los tuyos, sino todos) a veces me desorientan. Son algo como que pegan fuerte y dejan sin palabras. Sólo se siente.

Todo concentrado, puro sentimiento y efecto. Me ha gustado mucho esa vida de la planta trepando porfiadamente, poniendo verde donde sería inimaginable que hubiera, trapando porfiadamente, mostrando como una voluntad de llegar al cielo.

tanci dijo...

Querida Flaca, siempre me contento cuando pasas por aquí. Te diré que yo misma estoy experiemntando en los Haikus. Sé que algo me llega. Sé que algo me atrapa. Sé que algo me sugiere. No soy nada entendida, pero si soy practicante de la intuición y del momento fugaz. Parece ser que lo más importante en el Haiku no es lo que dice, sino lo que no dice.Haiku es simplemente lo que está sucediendo en este lugar, en este momento. Y se centra en lo cotidiano. Flaca, yo no sé pero me gustan. Y en tanto que me cautivan sigo a su lado de momento. Al tiempo sigo siendo una aprediz.
Te doy las gracias por tu visita y también por tus palabras cargadas de sinceridad. También te envío un caluroso abrazo más allá de los muros.

rosa mis vivencias dijo...

Hola Tanci;
La planta abrazada a la piedra,nos da ejemplo, los abrazos desvariamos darlos más a menudo,cuestan tan poco darlos y sin embargo que caros son.
Bonita imagen.
Pues eso,un abrazo grandeee.
Rosa.

virgi dijo...

Las plantas saben de supervivencia, de vivir con lo mínimo y salir adelante. Y nosotros, rodeados de ejemplos, nos empeñamos en no aprender.


Me encantó el minirato, muchos besos.

tanci dijo...

Rosa, totalmente de acurdo contigo. ¡Qué caros cuestan los abrazos!. Aunque aparentemente no deberían de costar. Nada tan sencillo como decir ¿me abrazas?. Y pedirlo así sin más. Es el mismo ser humano, sediento de ellos,el mismo que los niega. Me gusta verte por aquí. Gracias. Un abrazote.

tanci dijo...

También me gusto el minirato ;-) y el minirelato. Habrái que reaprender ciertas cosas que las tenemos delante de nosotros mismos y sin embargo las desechamos. Parece que nos son importantes. O no se les pone asunto. De una manera u otra que cada quien valore lo que más le llena. En este caso la planta llena el vacío de un patio, o mejor el hueco de ese patio. Al fin y al cabo un hueco es un vacío que ha quedado y que habría que llenarlo. ¿No crees?. Siempre gracias por tu visita. Un abrazo creciente.