sábado, 26 de septiembre de 2009

¿Utopía o realidad?



Se confabula el cielo
quedan sueltas las estrellas
aclamo a mi luna lunera
y no está dispuesta.

Pienso en mi estrella
pero está quieta
¿tendrá alguna querella?

Paseo lenta
poseo una quincena
persigo una quimera.

Este dolor me mata
este pesar me ataja
esta pena me ata.

Confío en la promesa
elegante, discreta y certera
de elevarme al cielo
lejos de esta tierra.

Paseo lenta
poseo una quincena
persigo una quimera.

Me brindas luceros
que corretean y juegan
yo ofrezco caricias
de ternuras abiertas
en mis manos envueltas.

Sucumbe al cielo
la bruma viajera
en días oscuros
por los rincones se cuela.

¿Qué queda?

el sol, la luna,
el mar, la tierra
el aire y las estrellas,

Paseo lenta
poseo una quincena
sueño con una quimera
plantada y cultivada
de corazón abierta.









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6 comentarios:

FLACA dijo...

Con una quincena, mar cielo, estrellas, luna y corazón abierto es difícil que no se cumplan los sueños de quimeras,amiga.

tanci dijo...

Mi querida Flaca... tienes toda la razón. Sólo hay que estar abiertos a esas quimeras que no lo son tanto si uno las recibe tal cuál son. Es decir, como auténticos regalos. Me da mucha alegría saberte por aquí.Hay un nexo entre mi utopía y tu realidad.Por ello estamos aquí, asomándonos siempre a esta bonita ventana de común unión.
Gracias por venir.

alicia barajas dijo...

Subirás al aire y jugarás con los astros... tu quimera ya no lo será, porque quizás las quimeras, como dices, no lo sean tanto. Un abrazo

tanci dijo...

Querida Alicia,las quimeras se las lleva el viento. Se esfuman entre los dedos y permanecen en el pensamiento. Siendo el pensamiento constructor de quimeras ¿ que hay que hacer para que esa construcción se materialice?.Tal vez atraparlas con el aire, elevarlas al cielo y mantenerlas en las estrellas...

alicia barajas dijo...

Tanci, igual es mejor dejar que las quimeras sean lo que son... no hay nada más tranquilizador que descubrir que la terrible pesadilla que padecíamos durante la noche, se disolvía al salir el sol...¿no crees? Un abrazo

tanci dijo...

Si, es verdad. Dejemos que las quimeras sigan su rumbo viajero al brillo del sol y al compás del aire. Me tranquiliza pues que sigan habiendo quimeras sutiles y tranquilizadoras.No tanto por aquellas que se encargan de volver del revés la ilusión. Gracias por tu nuevo comentario. Como siempre haciéndome pensar.