Niebla,
perlas de luces
como cuentas.
La arboleda
que se aleja...
Amarillos relinchones
nadan
en la alfombra
recién puesta.
Hierbas y trevinas
ríen esbeltas.
El trébol solitario
que no encuentras...
Ver y sentir
el paisaje,
esta tarde,
a mi manera...
¡Es primavera!
4 comentarios:
Precioso. Un beso.
Maravillosos esos relinchones, espejo del sol y de mano de la primavera. Y preciosas palabras, querida Tanci, un abrazo
Me alegra Teresa que te gustara. recibe mi abrazo.
Virgi, no te esperaba por aquí, je, je... Pues si, esperando la tan necesaria primavera y parece que no permite que el invierno nos deje ;-) Besitos.
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